Diciembre es un mes duro.
Es casi verano. Llegan las fiestas. Llegan los cumpleaños. Llegan los finales.
Diciembre es un mes extraño.
Todo el mundo se replantea su vida en diciembre. New year resolutions, "Este año va a ser distinto" and all that crap.
Todo el mundo hace balance en su cumpleaños. A los 30 ya hice esto o aquello. Me falta tachar de la listita de ToDo's esto, aquello y algo más.
Bueno, ahora imaginate que tu cumpleaños está a pasitos de fin de año. Y multiplicalo porque el 26 de diciembre de hace dos años, a tu vieja se le ocurrió morirse.
Que se yo. Es raro todo.
Siento que debería estar más triste. Y siento que debería estar más contenta. Y creo que tendría que celebrar los treinta a lo grande, pero también siento que ya es hora de dejar de mentirle al mundo y asumir que siempre fui una vieja atrapada en el cuerpo de una persona más joven.
Siento que quiero dejar de ser el relator, y empezar a estar en la cancha.
Creo que por eso no estuve escribiendo tanto, pero tampoco tengo la sensación de haber hecho demasiado. Nunca tengo la sensación de estar haciendo lo suficiente...
No sé qué hago con mi tiempo. No sé qué hago, y siento que no hago nada... Y estoy cansada de escuchar que la gente me diga "vos multiplicás el tiempo como panes... no sé cómo hacés tantas cosas".
Quisiera ser esa persona que todos creen que soy.
Por ahí pido eso cuando sople las treinta velitas.
3 comentarios:
ABRAZOOOOOOOOOOO MUCHOOOSSSS
TE QUIERO!!! y todo lo que lees pff me llega tanto, quizás porque este año fueron mis 30 y este año 15 días después mi mamá se fue.
Así es la vida amiga, secreto, no sos la única vieja en cuerpo de joven.
Besos
mmmm a mi me gusta tal como esto deja ver que sos.
bueno, eso.
Gracias gente :)
Abrazo a los dos.
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